martes, 23 de diciembre de 2014

Otra Navidad

   En estas fiestas tan entrañables hay que hacer un esfuerzo.
   Nada de gordos, que tienen mucha grasa, ni de flacos, que tienen poca carne.
   Esta vez habrá que conseguir alguien atlético. Su carne es más sabrosa. El único inconveniente es que no se dejan atrapar tan fácilmente.
   Una vez conseguido, ardua tarea, ya podemos poner manos a la obra.
   Somos ocho a la mesa. ¿Será suficiente una o dos piezas?

   Desde esta humilde casa os deseamos Felices Fiestas y que no seáis parte de nuestro festín.

domingo, 7 de diciembre de 2014

Nueve meses

  



   ¡Quiero salir de aquí!
    Por más que golpeaba con mis pies y mis manos esta habitación tan húmeda no había manera de que alguien me escuchara.
   
    La espera la mataba de dolor. Notaba que el ser que llevaba dentro no estaba dispuesto a esperar tanto tiempo.

   Tanta violencia en un cuerpecito tan pequeño....

La biblioteca






   Allí podía soñar despierto sin ser molestado porque los que visitaban aquel lugar tenían sus mismos sueños.
   
Un profundo silencio se hacía en la sala, custodiado por las almas de los libros. Sí, cada libro tenía alma, un mundo interior que había que descubrir y que cuando lo hacías ya nada era igual.

   Eso es lo que hacía él todos los días: descubrir esos mundos y alimentarse de ellos. No había nada mejor que su profesión, la de bibliotecario.

viernes, 14 de noviembre de 2014

Última voluntad




   Notaba calor, mucho calor. De pronto el sitio se llenó de humo y no podía respirar.
   El calor se convirtió en dolor, un dolor insoportable.
   Empecé a golpear la madera con mis nudillos y a intentar chillar, pero no podía porque el humo llenaba mi garganta.
   Notaba como la carne se fundía y eso fue lo último que sentí.

   La incineración no fue una buena idea.

domingo, 9 de noviembre de 2014

Ya no estás

Ya no tienes fiebre, cariño.
Ya no tienes dolor ni miedo.
Ya no estás aquí, pero siempre estarás conmigo.
Me acompañarás a donde vaya,
me ayudarás a no olvidarte

porque no se puede olvidar la felicidad.

viernes, 24 de octubre de 2014

Por la noche

     En el silencio de la noche, cuando todo el mundo duerme, es cuando puedo oírlos.
     Oigo los sueños. Cuando son placenteros es como una suave música, pero cuando son pesadillas el sonido es insoportable.

     Ya aprendí a no escuchar los míos, porque, aunque no lo creáis, oigo mis propios sueños y hace tiempo que no son nada placenteros. Por eso escucho los de mis hijos. Me ayudan a dormir. No hay nada mejor que un ser puro para tener un sueño reparador

sábado, 18 de octubre de 2014

La Guerra

   La tierra se movía con sus pasos de gigante. La tierra se moría con sus arranques de ira.
   Ella solo tenía un interés: la conquista. Y Ella no se daba cuenta que con sus acciones no había nada que conquistar, sólo la Nada.

jueves, 9 de octubre de 2014

¿Volverás?

   ¿Sabía lo que decía cuando te comuniqué mi decisión? No. Fue fruto de la ira y de la frustración.
   “No quiero verte más” es lo último que te dije y de lo primero que me arrepiento.
    Ahora mi vida es un vacío que no lo llena ni mi propia existencia. Te necesito y lo sabes, y por eso me vas a hacer sufrir hasta volver de nuevo a mí. Porque, ¿volverás?, ¿verdad que sí?
 

viernes, 26 de septiembre de 2014

Melancolía

Echaré de menos sus risas, sus abrazos, sus besos,...
Echaré de menos el amor que sin decir me lo demuestran.
Echaré de menos tantas cosas...

Echaré de menos la vida.

jueves, 25 de septiembre de 2014

Vida de un perro





   Todo fue cuestión de un día. Nada fue programado. Surgió sin más.
   La vi en una esquina y fue un flechazo mutuo. Se acercó a mí y me miró con esos ojos tan profundos y claros, destilaban bondad.
   La vida me cambió desde el día que la conocí. Me arrojaron desde un coche en marcha y tuve la suerte de no ser atropellado. Pude guarecerme de la lluvia bajo un árbol. Fui deambulando hasta llegar a la ciudad. Allí es donde la encontré.
   Desde ese día estamos juntos y no pienso separarme de ella hasta que, como dicen los humanos, la muerte nos separe.

miércoles, 24 de septiembre de 2014

Un futuro mejor

   Todos los demás se fueron, abandonaron sus sueños sin mirar atrás. Yo me resistía a hacerlo.
   Quería vivir en mi país y si eso incluía el ser un rebelde así sería.
   Quería un futuro mejor para mis hijos, un futuro sin temor ni represiones, un futuro donde pudiera mirar a los ojos de la gente y no viera en ellos miedo y angustia.
   Estoy seguro que hay muchos igual que yo y que si unimos nuestras fuerzas podemos derrocar al gigante, igual que hizo David con Goliath. Ahora mi tesón es encontrarlos y hacer un frente en común para que se nos oiga. Nos buscarás y nos distinguirás al momento porque andamos con la cabeza erguida, sin temor, pero con la prudencia de no hacernos destacar demasiado entre los demás.

   Algún día todo esto habrá sido una pesadilla y como tal, al despertar se desvanecerá.

sábado, 6 de septiembre de 2014

Las estaciones

   Verano.
   Me angustiaba la sensación de tamaño calor.
   No soportaba que me tocara. Ardía. Y yo, helada. El fuego y el hielo. Aún así, nos amábamos. Él ansiaba el frescor de mi cuerpo y a mí me gustaba que me deseara. Mi egoísmo a veces no me permitía demostrarle todo mi amor. No soportaba el calor.
   Invierno.
   Yo buscaba su calor y él, generoso, me lo ofrecía sin pedir nada a cambio. Notaba que se estremecía con mi gélido cuerpo, pero aguantaba esa sensación sólo por estar a mi lado. Amor en estado puro.


   Ya, de mayores, su fuego se fue apagando, pero yo aún conservaba esa gelidez. El verano se llevaba mucho mejor y el invierno lo calentábamos con nuestro deseo. Y siempre que fallaba el deseo se podía solucionar todo con una buena manta, acurrucados, abrazados.

jueves, 28 de agosto de 2014

Amor


   La tenía enfrente y su maldito carácter no le permitía demostrar lo mucho que la quería. Sólo podía decírselo en sueños y surtía efecto porque, al despertar, ella siempre le miraba con cara embelesada y lo colmaba de besos.

domingo, 17 de agosto de 2014

Este viaje alucinante

   ¿Quién no ha deseado a veces morir? No creo que sea un pensamiento demasiado ilógico. A veces ocurren cosas en tu vida que hacen desear que acabe. Sufrimiento que te parece eterno y que quieres que termine.
   Pero ese pensamiento es efímero porque sabes que la vida es un viaje que hay que disfrutar. Tantos las alegrías como las penas hay que experimentarlas porque es parte de este viaje emocionante.
   El dolor es lo más difícil de llevar, pero también es la sensación más impactante, la que te dejará más huellas y que te ayudará a sobrellevar los demás sinsabores. No todos soportan ese dolor y no llegan al final del viaje, pero estoy seguro que si pudieran hubieran remediado ese trágico final.

   Ya sé que me diréis que no sé lo que digo, que no he sufrido tanto para poder hablar, pero os digo que el sufrimiento está en todos y que todo lo que empieza acaba y que nada es eterno, ni siquiera la vida. Tenéis que disfrutarla. La felicidad no se basa en algo material sino que incluso la sonrisa de un niño os puede hacer tener un día más llevadero.

domingo, 10 de agosto de 2014

El ser humano

   Hasta aquí hemos llegado. Ya no puedo más. He intentado comprender la forma de actuar de los demás seres humanos y no la entiendo. No comprendo la hipocresía ni la mentira. ¿Es tan difícil decir lo que sientes?¿Por qué mentir?. No lo entenderé, ni quiero entenderlo nunca.
   Sería tan fácil explicar las cosas por su nombre, sin medias palabras...

   Tengo la esperanza de que haya más gente como yo, y si la hay no lo sabré nunca porque no confío en nadie. Ya me han decepcionado bastante.

viernes, 8 de agosto de 2014

La Tierra

   Quería ver la Tierra y lo único que podía ver era una foto antigua que habían conservado sus abuelos. Le habían hablado tanto de Ella...
   Los primeros colonos de Marte fueron sus bisabuelos. La Tierra se estaba muriendo y las acciones de los humanos no hacían más que agravar la situación.

   No sabía cuánto tiempo iba a durar Marte en morir, al igual que la Tierra. Los seres humanos no aprendían de sus errores. Sus descendientes tendrían que buscar otro planeta para colonizar.

jueves, 31 de julio de 2014

Guerras

    Nacía cada día y disfrutaba de ello como si fuera el último.


    Sabía que podía no ver el amanecer, sabía que la locura de los hombres podía apagar sus esperanzas de ser adulto. Aunque ya lo era. Con tan solo 6 años tenía la madurez suficiente para saber que esas bombas no eran de juguete y que podían apagar su sonrisa de un día para otro. Lo había visto. Había perdido a muchos de sus amigos del cole y no había podido hacer nada por ellos. Porque era un niño. Un niño en un juego absurdo de hombres sin raciocinio.

miércoles, 30 de julio de 2014

La razón


 La cabeza le llevaba a un lado, el corazón a otro. Hizo caso a la cabeza y la perdió.

domingo, 29 de junio de 2014

La donación

   Cada vez que notaba su mano encima de su cuerpo sentía un escalofrío. De terror.
   Su mano era pequeña y cálida. Movimientos precisos y estudiados sobre su helado cuerpo eran los que le hacían estremecer de pavor. Sabía que iban a ser unos minutos, pero después de eso no iba a ser el mismo.

   ¿Por qué se le ocurrió la genial idea de donar sus órganos tras su muerte?

Stress


Su aceleración desaceleraba su corazón.

sábado, 28 de junio de 2014

El escritor

   Por un malentendido se acabó su carrera como escritor. Pusieron en sus frases palabras que él no había escrito, sentimientos que no había reflejado. Odio y rencor donde él había plasmado amor y esperanza.

   Tenía que empezar de cero, pero esta vez con más cuidado. Tendría que vetar ciertos temas en sus escritos, aún a su pesar. Su próximo libro debería ser un globo sonda que reflejara los sentimientos de los demás, aunque no fueran los suyos.  

martes, 24 de junio de 2014

La batalla

   Ese dolor la estaba matando, pero aún así no pidió a la enfermera ningún tipo de calmante.
   Quería sentir, quería llorar, quería vivir. Ya llevaba mucho tiempo llena de drogas para atenuar el dolor y lo único que le hacían era atontarla y dejarla adormecida, como en una nube.
   Ahora quería sentir todo lo contrario, notar como su cuerpo luchaba contra esta enfermedad mortal y ella quería colaborar en esa lucha, y ganarla. Sería una batalla dura, pero llena de alicientes, entre ellas el haber vencido a la bestia.
   Todos los días se despertaba llena de esperanzas. La noche era el único momento en el que permitía que la enfermera la llenara de calmantes. Quería estar descansada para luchar y no había cosa mejor que el haber dormido un poco bien.
   Notaba cada día el dolor era menor y sus fuerzas mayores.
   La llegada de la primavera colaboró en su lucha, tanta luz le daba energía y ese olor tan especial que sentía al abrir la ventana de la habitación, el olor de la vida.

   Ese día creyó soñar. Ya no sentía dolor, sabía que la batalla la había ganado.


   Ese día ya no despertó, pero sentía que había ganado, que había vivido hasta el final. Siguió soñando.

jueves, 19 de junio de 2014

Alcohol y escritura

   ¿Por qué cuándo estás un poco “mareado” te vienen ideas a la cabeza que ni siquiera se te habían ocurrido antes? Yo lo he notado. Basta tomar una copa de vino y se te ocurren temas para una novela o para un nanorrelato.
   No por eso fuerzo la máquina, o sea, no todos los días tomo una copa de vino, pero en cuanto lo hago es como si mi cerebro se expandiera y tuviera ideas que ni forzándolas se me ocurrirían.
   Le ha pasado a grandes escritores: Lope de Vega, Quevedo, Dostoyevski, Hemingway, Allan Poe, etc. Éstos han tenido grandes problemas con el alcohol, ni punto de comparación con tomar una copa del vino al día, pero bueno, os pongo estos escritores para que veáis que a veces el alcohol ha ayudado a escribir grandes obras. No por eso hago un apología del alcoholismo, ni mucho menos, pero ha resultado curioso la relación del alcohol con los grandes escritores.


   Seguramente alguno de vosotros habéis tenido esa sensación de “expansión ideológica”, pero no os recomiendo que dependáis de ello.

domingo, 8 de junio de 2014

El cambio

   Tras esos oscuros ventanales había una mujer sentada, pensando en su futuro. No sabe si abandonar a su marido o seguir con él. Si darle otra oportunidad o irse de esa casa sin mirar atrás.
   Su marido ha cambiado mucho desde hace un tiempo, que a ella le parece eterno. Ya no se acordaba ni del hombre con el que se casó, sólo de la “persona” que ahora tenía en casa, viviendo con ella.
   Las risas se convirtieron en silencios. Ya no hay complicidad. Y no sabe la razón de ese cambio tan brusco porque a ella le parece que todo sigue igual, en el entorno, el trabajo, la vida social. Todo.

   No sé cómo explicarle a mi mujer el tormento que llevo por dentro. Todo ha cambiado de un tiempo a esta parte. El trabajo se me ha hecho insoportable, con la tensión de si un día ya no seguiré en él. Los amigos ya no son como antes, sólo piensan en lo que tienes y no lo que eres. Ahora me doy cuenta que todo era puro interés. No hay ni uno que me haya preguntado cómo estoy ni lo que siento.
   Mi mujer ya no es la que era. No puedo acercarme a ella ni expresarle mis sentimientos. Me elude. Ya no es la mujer con la que me casé y con la que compartía mis temores y mis alegrías. Me mira como si fuera un extraño. Estoy pensando seriamente en no seguir con ella.
   ¿Por qué todo ha cambiado?
   Estoy pensándolo bien y creo que hablaré con ella seriamente. Quiero recuperar a la amiga con la que he vivido todos estos años y por la que merece la pena seguir adelante. Esta noche hablo con ella.

   Tras esos oscuros ventanales hay dos personas sentadas, hablando del futuro y se les ve felices .


viernes, 6 de junio de 2014

domingo, 1 de junio de 2014

Sin vuelta atrás

Vio que todo lo que relucía no era oro sino cristal, tan frágil como el alma del hombre.

Cada vez se adentraba más y más en ese brillo y sabía que no había vuelta atrás.

domingo, 25 de mayo de 2014

Ya no estás

Cuando te sueño te añoro,
cuando te sueño te pierdo.
Cuando despierto aún sueño
que estás a mi lado,
que nunca te fuiste.
Abro los ojos y ahí estás,
ausente.

viernes, 23 de mayo de 2014

Pecados


   No hay peor verdugo que uno mismo, sobre todo si tienes muchos pecados por expiar.

martes, 13 de mayo de 2014

A contracorriente

   Nadó contracorriente y pudo llegar a la orilla sano y salvo.
   Otros lo habían intentado antes y perecieron en el intento.
   No sabía que su éxito sería el precursor del nacimiento de otros que nadarían a contracorriente con el riesgo de morir ahogados.

   Merecía la pena intentarlo.

domingo, 4 de mayo de 2014

Mi pueblo

    El viaje va a ser largo y pesado, pero vale la pena.
    Montado en el tren la memoria me lleva a mi niñez, a esos dulces años. Ahora, ya adulto, quiero revivir mi infancia y eso me lleva regresar al lugar que me vio crecer.
    Cuando era pequeño, aunque era feliz, soñaba ser mayor e irme de allí. Menuda estupidez. No sabía lo mucho que iba a echar de menos todo aquello.
    Respirar aire puro de nuevo y ver esos paisajes me dan esperanzas para curar esta ansiedad que no me abandona. Necesito abandonar esta vida que hasta ahora he tenido, necesito vivir.
    Os preguntaréis de qué viviré allí. También me lo he preguntado, pero ahora no me importa. Allí tengo una casa, que ahora está abandonada. Tenía un pequeño huerto. Viviré de él, o eso espero.
    Ya falta menos.
    Ya he llegado. No reconozco nada de lo que estoy viendo. ¿Dónde está la iglesia?¿Y la plaza donde tantas veces he jugado?¿ Me habré bajado del tren antes de tiempo?
    Nada es como antes. Han pasado treinta años y lo único que veo son calles asfaltadas y tiendas. Este ya no es mi pueblo, ni siquiera su reflejo.


    La ansiedad me persigue.

viernes, 2 de mayo de 2014

Otro lugar



   Cuando cierro los ojos la veo esperando en el andén del tren, con su abrigo a cuadros y su maleta marrón. Si me esfuerzo un poco puede definir bien su cara: piel pálida, pero no enfermiza, unos ojos grandes y marrones, color miel y unos labios carnosos, pero siempre temblorosos, como si estuviera a punto de llorar.
   Ese día me estaba esperando y no fui lo bastante fuerte para salir a su encuentro. Fui un cobarde. No estaba preparado para partir a otro lugar, el que habíamos decidido para empezar juntos una nueva vida.
   Mientras la miraba, sin que ella lo supiera, me di cuenta que ella se iría con o sin mí. Estaba dispuesta a marcharse lejos de este pueblo que la ahogaba.
   Todos los días la recuerdo, cuando cierro los ojos. Y, cuando me vence el sueño, estoy con ella en ese lugar. Y soy feliz.

Adulto


   Los adultos ya no vemos hadas. Los adultos ya no soñamos. Sólo vivimos.

miércoles, 30 de abril de 2014

El mar

    Siempre me ha producido terror la profundidad del mar. Cuando era pequeñito, y aún hoy ya grande, cuando me adentraba en el mar tenía que ser en una zona que pudiera ver aún mis pies.
    Lo desconocido me da miedo, lo confieso. Admiro, más bien me asombran, a las personas que se tiran al agua mar adentro sin saber lo que tienen a su alrededor. Quién o qué se puede acercar a ti sin saberlo.
    Yo creo que el terror acuático me vino desde que un día de playa me adentré un poco (aún estaba en la orilla) y vino una ola. Cuando se retiró la ola, tenía pegado un pedazo de pulpo en mis piernas. Me las abrazó y me hizo caer. Mientras, venía una ola más grande. El terror se apoderó de mí porque los tentáculos me llegaban hasta la cadera y la cabeza del pulpo me parecía repugnante. Menos mal que esa ola venía con fuerza e hizo que el pulpo se despegara.
    Las risas de mi familia fueron de campeonato, pero ya me gustaría a mí que ellos estuvieran en mi pellejo en ese momento.

   En fin, desde ese día ya nada es lo mismo. Si en la orilla me atacó un pulpo cualquiera sabe lo que me podría atacar en una zona donde todo allí abajo es oscuro. ¡Prefiero no pensarlo!

domingo, 20 de abril de 2014

El fin del mundo



   ¿Nunca habéis tenido la absurda idea de ser únicos? ¿Que nunca os podéis morir? Sí, ya sé que eso es producto del egocentrismo que tenemos todos, pero suelo tener esa idea y sé que no es posible, pero la idea no me abandona.
   Siempre que me sucede algo que puede poner en peligro mi vida suelo pensar que no es posible que me pase nada, que no me puedo morir. Menuda idea más idiota, pero me consuela y me serena.
   
   Pero la verdad es que cuanto más mayor me hago esa idea me va abandonando y el miedo a morir es más fuerte que la idea de ser inmortal. El pensamiento que me serena en esos momentos es que no me puedo ir hasta que mis hijos se hagan mayores, puedan independizarse, ... Y cuando se hagan mayores y se independicen la idea será otra. Todo para no dejar que el terror a la muerte me paralice y no me deje vivir lo que tenga que vivir.

   Ya sé que cuando me vaya la tierra seguirá girando, pero mi mundo se habrá acabado. El fin del mundo habrá llegado.

sábado, 19 de abril de 2014

No todo es



   El estar al borde de la muerte te hace apreciar la vida de una forma absoluta. Cuando sabes que vas morir las cosas las ves y las sientes de otra manera. Todo lo ves como si fuera la primera vez, como un niño que aprende a dar sus primeros pasos.
    Aprecias la vida de los demás y aprendes que cada ser es un mundo y que no todo tiene que ser como tú digas sino como la vida lo marque.

    Cada uno deberíamos estar al borde del precipicio para saber que ahí abajo no hay un fin sino un principio.

miércoles, 16 de abril de 2014

Una terapia milagrosa



   Me gusta la gente que escribe. Es como si tuvieran otro yo que les obliga a expresar sus sentimientos. Sin la escritura ese alter ego no existiría. Me identifico con ellos porque pertenezco a la misma secta y no me avergüenzo. Con la escritura podemos morir, vivir en otros mundos, matar y sufrir cien martirios sin hacernos y hacer daño a nadie. Sólo usamos la imaginación y creo que es el arma más poderosa que me he encontrado hasta ahora.¡Cuántas veces he apaciguado mi ansiedad escribiendo!
   Sabemos que a lo mejor no nos va a leer nadie (ojalá que sí), pero nos encontramos mejor escribiendo. Es una terapia muy poderosa. Probadla si no lo habéis hecho aún y sólo os limitáis a contemplar. Os aseguro que os enganchará y ya no podréis vivir sin ello.

martes, 15 de abril de 2014

Obras



   Las obras en casa y sus consecuencias. Sólo es cambiar el calentador de la cocina y ya han hecho más agujeros que los que tengo yo en el cuerpo.
   Lo veréis un absurdo, pero ahora mismo me está entrando ataque de ansiedad con sólo pensar en la limpieza de la cocina. Eso de ser una maniática de la limpieza tiene sus consecuencias, buenas y malas.    Las buenas, que está todo más limpito. Las malas, que hasta que no acabo de limpiar todo no estoy tranquila y eso saca de quicio a mi familia y también a mí.
   Empezaron a las 9.00 ¡y ya son las 14.00!. Estoy del p... calentador hasta un sitio que no debo mencionar por educación. Todo son complicaciones. Jo, parecemos un imán para ello.
   Espero que cuando a vosotros os pongan un calentador, caldera o lo que sea que os pongan, no tengáis tanto trajín.
   Un saludo y, nada, a esperar que acaben.

lunes, 14 de abril de 2014

jueves, 10 de abril de 2014

Gracias





  Todos los días a la misma hora llamaban a mi puerta. La abría y me encontraba a una niña pequeña, llorando sin consuelo. Cuando le preguntaba quién era y cómo había llegado hasta allí obtenía el silencio como respuesta, pero en su cara se veía un reproche. Estaba enfadada conmigo y no sabía la razón. No conocía a esa niña de nada.
   Esa escena no tardaba más de media hora porque en cuanto iba a coger el teléfono para llamar a la policía, la niña había desaparecido como por arte de magia.
   Estuve investigando un poco el origen de esa niña. Pregunté a los vecinos si tenían alguna sobrina o alguna nieta de esa edad. Calculaba que tendría unos cuatro añitos. Nada de nada. También hablé con la policía y me dijeron que no había denuncia de niña desaparecida.
   Al día siguiente, a la misma hora, como todos los días desde hace un mes, llamaron a la puerta. La abrí, sabiendo qué me iba a encontrar tras ella. Mejor dicho, quién. Otra vez la niña, pero esta vez no lloraba, sino que estaba muy seria, con los ojos enrojecidos de haber llorado mucho.
   -¿Quién eres?- le pregunté. ¿Por qué llamas siempre a mi puerta?
   -Tú eres mi mamá. Ibas a ser mi mamá y no quisiste serlo.
   Todo esto debía ser una alucinación mía. ¿Cómo iba a ser mi hija? Esto era una locura. Pasó lo mismo de siempre: en cuanto llamé a la policía la niña desapareció.
   La “alucinación” siguió durante varios meses, y siempre igual. Pero un día dejó de aparecer. Menos mal, porque con mi reciente embarazo el estrés era lo peor.
   A los nueve meses nació una niña preciosa, a la que llamamos Lucía. Era lo mejor que me había pasado en mi vida.
   Lucía era la niña más buena del mundo. Sus ojos me recordaban mucho a los de la niña producto de mi imaginación, pero no le di la mayor importancia.
   Cuando Lucía tenía unos cuatro meses y estaba durmiendo en su cunita llamaron a la puerta. Noté un escalofrío porque sabía quién llamaba, lo sabía. Tenía la intención de no abrir la puerta porque quería que la alucinación no empezara de nuevo, pero aún así la abrí.
   Allí estaba. No había cambiado en absoluto. Parecía tener siempre la misma edad. Pero el semblante era distinto. Estaba feliz y sonriente.
   -Gracias


   Nada más decir eso se fue como había venido. Sin explicación alguna.

martes, 8 de abril de 2014

Un refugio



   Aquí estoy yo, bajo la lluvia, sin otro refugio que mi propio cuerpo, sin otro refugio que mis sueños. Sueños de una vida mejor, de un futuro prometedor, queriendo dejar atrás un oscuro pasado, lleno de sinsabores. Ese pasado nunca vio la lluvia, sino un sol atroz que quemaba por dentro y por fuera. Días largos y noches frías.
   
Atrás dejé un amor, un amor tan inmenso que me hizo soñar con la libertad tanto tiempo ansiada y que juré compartir con él si alguna vez la lograba. Creí en falsas promesas de un paraíso en la tierra y por ello arriesgué mi vida, feliz de haberme atrevido a retar al destino, un destino que me habían augurado aciago y que me resistí aceptar.


    Y ahora sigo aquí, bajo esta lluvia que no cesa y que poco a poco va calando mi ánimo y mis sueños, intentando buscar una mano amiga que me ayude a encontrar un poco de sol, un cielo libre de nubes negras, negras como el color de mi piel. Color que nunca me ayudó en estas tierras y que no entiendo el porqué.

Venganza




   El sueño me impedía pensar con claridad. Estaba a punto de perder la conciencia, pero el terror hacía que mis ojos no se cerraran del todo.Sabía que más tarde o más temprano él me iba a atacar y que sería mi fin, pero no se iría de allí sin haberse llevado un recuerdo mío.
   Él atacaba a sus víctimas sin previo aviso, por la espalda, y las llevaba a su lugar preferido, su santuario. Allí las hacía sufrir de tal manera que lograba lo que tanto ansiaba: un grito de auténtico sufrimiento. Después de eso las dejaba marchar, pero tan humilladas y marcadas que ya no eran las mismas de por vida. Eran auténticos cadáveres vivientes, simples autómatas.
   Yo, como estudiosa que era de su forma de actuar, sabía lo que ansiaba y lo que le daba más satisfacción. Cuando me atacó por la espalda y me tiró al suelo aún no sabía quién era. Lo supe cuando dijo las palabras mágicas: “ya no vas a ser la misma durante toda tu vida, te arrancaré el alma”. Estas palabras siempre las decía después de derribar a su presa. Me lo relató la última víctima después de someterla a hipnosis, ya que de otra manera no hubiera sido posible arrancarle palabra alguna.
   Esta vez fue diferente. Me ató las manos y los pies y me amordazó. Me llevó a su escondite y allí, frente a mí, estuvo contemplándome un rato.
   -Ya sé quién eres-me dijo
   -Como ya sabes mi modus operandi haremos algo original, diferente. Te atacaré cuando te duermas. Será más interesante y excitante. Quiero saber si el grito de dolor es el mismo, si sufres igual que ellas.
   -No te voy a dar ese gusto-le respondí.
   -Sí que lo harás. Más tarde o más temprano te dormirás y ahí estaré yo, despertándote con un dolor que no podrás imaginar.
   Estuvimos así durante dos días, pero al tercero no pude aguantar más y cerré los ojos. Pero estaba preparada para su ataque, para lo que iba a pasar a continuación.
   Lo que nunca pude imaginar es que él también sucumbiría al sueño y con ello que el cuchillo que llevaba en la mano se caería cerca de mí. Lo vi en cuanto me desperté. Siempre me quejaba que nunca no lograba dormir más de dos horas seguidas, pero ahora le daba gracias a Dios por ello.
Logré alcanzar el cuchillo con los pies atados y ponerlo un poco en vertical para cortar las cintas de las manos. Luego me corté las de las manos. Estaba libre, pero con ese bestia dormido cerca de mí.

   Desde hace unos días que lo martirizo profundamente y los gritos que salen de su garganta son más de un animal que de una persona, pero me satisfacen profundamente. Lo tendré así tantos días como víctimas ha tenido. Luego lo dejaré a su suerte.

   -Hemos encontrado un hombre blanco, semidesnudo y con marcas profundas en el cuerpo. Parecen de cuchillo.
   -¿Le habéis podido interrogar?
   -Ha sido imposible. Parece un cadáver andante. No suelta palabra alguna. Además, no tiene huellas dactilares que nos posibilite la identificación.


   Desde hace unos años que está en un psiquiátrico. Pero siempre hay alguien que le visita y le habla. Cada una de las víctimas que él logró y que ahora van recuperando su cordura a costa de la suya.

viernes, 4 de abril de 2014

Orgullo

   Un reproche, un grito, una mala frase expresada con la cabeza, pero no con el corazón. Toda una vida, en un segundo, se deshace, como un castillo de naipes deshecho por una corriente repentina. ¿Quién remedia ahora lo que en un segundo no quisimos decir, pero que salió de nuestra boca antes de que lo pudiéramos impedir?

   Sólo nos queda una forma de enmendar el error: pedir perdón. Pero para ello hay que liberarse del orgullo y eso no siempre es fácil. De ello depende nuestra felicidad.

domingo, 30 de marzo de 2014

Alzheimer

   Cada cierto tiempo hacía un esfuerzo por recordar, pero su memoria se estaba borrando. Se sentía como un disco duro al que estaban formateando.
   Ya no sabía el porqué de su existencia, ya no sabía el motivo de su letargo.
   Se daba cuenta de lo que le estaba sucediendo y eso le aterrorizaba porque perder la memoria para él era morir en vida.
   Decidió luchar contra esa enfermedad con todas sus fuerzas y lo primero que decidió hacer fue escribir sus memorias, con la ayuda de su familia, ya que había cosas de las que ya no se acordaba.
   También colaboró con sus médicos para encontrar un medio de enlentecer el proceso.
   Llegó el momento y la luz se apagó. Se miraba en el espejo y no reconocía a la persona que se reflejaba en él. Ni siquiera a sus hijos, a los que consideraba personas extrañas.
   Solo le ayudaba un cuaderno que tenía en su habitación. Más que un cuaderno era un libro mal encuadernado. Se sentía bien cuando lo leía, en paz consigo mismo, y no sabía el motivo. Solo que cuando lo leía sentía como si lo hubiera escrito él mismo.

   Relataba la historia de un hombre, desde su nacimiento hasta su muerte.

viernes, 28 de marzo de 2014

sábado, 22 de marzo de 2014

Hipocresía

   Estoy en contra de todo maltrato animal, pero también en contra de la hipocresía.
   Me indigna sobremanera cómo hay personas que se escandalizan por ver cómo maltratan a un perro o a un gato y, en cambio, les gusta asistir a la matanza del cerdo o asistir a una corrida de toros.
   En algunos países comen perros o animales que nosotros consideramos mascotas y los consideramos “irracionales”, pero está bien que nosotros nos comamos un corderito o un cochinillo.


   También estos animales que nosotros matamos y comemos sufren igual que los animales de “compañía”, pero, claro, no los matamos nosotros sino que lo hacen por nosotros otras personas y no vemos cómo lo hacen.

domingo, 16 de marzo de 2014

Mamá

   Encontré un refugio en este lugar tan oscuro y húmedo.
   La soledad no es tanta. Me acompaña una voz cálida, que me hace sentir seguro. Me habla y no entiendo lo que me dice, pero sé que es algo bueno. Me reconforta.
   Esa voz me alimenta y me siento cada vez más fuerte y con más energía, con ganas de salir de este lugar .
   No entiendo lo que me pasa. Ya no hay sitio para mí en este refugio. De pronto se ha hecho pequeño y estrecho. Lo único que veo es una luz que me guía hacia una salida.

    Ya veo a “la voz”. Es tan dulce como imaginé que sería.

miércoles, 12 de marzo de 2014

Rechazo

    Todo lo que hizo fue en vano. La agasajó con mimos, con unos cuidados que hubieran sido la envidia de cualquiera, pero aún así fue rechazado.

   La vida no le quería a su lado. Una historia de amor imposible.

Desgana


   Hoy no tengo ganas de nada. Ni de quererte.

jueves, 6 de marzo de 2014

Encefalograma plano

   Encefalograma plano. Ninguna actividad cerebral. Eso es lo que diagnosticaron los doctores y comentaron a sus familiares.
   Él, en su sueño eterno, seguía escribiendo. La musa no le había abandonado.

  Qué más da lo que dijeran los expertos en medicina si él era feliz, en su mundo. La única pena es que ya no podía reflejar sus historias sobre un papel. Ahora solo podía contarlas a los que le venían a visitar de vez en cuando, a los de su misma condición.

sábado, 1 de marzo de 2014

Amor incondicional

   El hombre paseaba por la calle sin dirigirle la mirada en momento alguno, sabiendo que él estaba a su lado y no se despegaría.
   Estaba en lo cierto. La mirada de ese perro hacia su dueño, si lo podemos llamar así porque nadie es dueño de nada, era de total rendición, amor incondicional.
   Ya estaba acostumbrado al silencio de su “dueño”. Con solo dirigirle una mirada él sabía lo que le quería decir. Bueno, hasta ese momento.
   Un día, como todos, se fueron a pasear. Él, siempre cerca del hombre, sin apartarse en ningún momento. Esta vez su “dueño” empezó a hablarle, cosa extraña en él. Pero cosa curiosa: no entendía nada de lo que le decía. Es como si de su boca salieran solo ruidos, sin ninguna conexión.
   De pronto entendió todo, no por lo que el hombre estaba hablando sino por su mirada. Era de absoluto terror. En ese momento se dio cuenta de una cosa: el paraje por el que caminaban no le parecía familiar, ni siquiera la gente con la que se cruzaban. Era gente extraña, que los miraban con absoluta curiosidad y que les daban la bienvenida. Pero, ¿por qué?

   Poco a poco la mirada de terror de su dueño se fue atenuando y empezó a sentirse más tranquilo, más seguro. Todo parecía más familiar, incluso estaban cruzándose con personas que hacía tiempo que no veían, que creían ya muertas...

miércoles, 26 de febrero de 2014

Miedo

Tengo miedo a no despertar
tengo miedo a no poder seguir amando
tengo miedo a que los míos solo me recuerden
por la foto en un marco.
Tengo miedo a que después de esto
no haya un algo.


Piensa

   Cada vez que me golpeas vas desapareciendo en el espejo de mis recuerdos.
   Cada vez que me insultas estás cavando un pozo sin fondo del que no podrás salir,  porque no te merecerás la ayuda de nadie para salir de él.

   Piensa que si no cambias te quedarás solo, sin nadie que te ame, sin nadie que te recuerde.

domingo, 23 de febrero de 2014

Carmen

Dentro de mí ya bailaba.
Su nacimiento no fue fácil.
Baila, ríe y juega sin parar
como si la vida le fuera en ello.
Todo lo que toca lo convierte
en música.
Todo lo que baila lo convierte
en magia.
Su cuerpecito es frágil por fuera,
vital y robusto por dentro.
Siete añitos de pura magia.

Siete añitos de felicidad.

sábado, 22 de febrero de 2014

Curioso

Quería volar y la única forma que tenía de hacerlo era morir.
La muerte era para él una ventana abierta a otros mundos.

Ya había vivido en el nuestro durante mucho tiempo y ahora le tocaba explorar otros.

miércoles, 19 de febrero de 2014

Remiendo

   Enhebró la aguja y empezó a coser.

   Se dio cuenta de que todo su esfuerzo por reparar el roto era inútil. Su alma ya estaba rasgada y los remiendos no servían de nada.  

lunes, 17 de febrero de 2014

Inocencia

   Ya desde pequeños les imponemos reglas absurdas, censurando su libertad y su inocencia. No nos damos cuenta que sin esa censura el mundo sería infinitamente mejor.
   Adoro la infancia y amo a las personas que, siendo ya “mayores”, han sabido conservar esa parte de locura que se tiene cuando se es niño.
   Un niño es locura, en el buen sentido de la palabra, mezclado con inocencia y espontaneidad. Un cóctel que no todos sabemos digerir.


   Lo único que deberíamos enseñar a un niño es el respeto al semejante, porque, ¿qué hay de malo en todo lo demás?

sábado, 15 de febrero de 2014

Fobia

   Ver una aguja hipodérmica y caerme al suelo es todo en uno. Lo siento, pero es superior a mí.
   A la hora de hacerme un análisis de sangre tengo que imaginarme que la señorita que me extrae la sangre está como Dios la trajo al mundo, o sea, en pelotas. Aún así, el suelo es mi mejor amigo en cuanto la señorita deja de martirizarme.
   Ya sabéis que al salir de la sala de los vampiros, como la llamo yo, hay que apretar la zona agujereada durante cinco minutos para que no te salga un hematoma que te dura por lo menos una semana. Pues bien, yo no duro allí ese mencionado tiempo porque si lo hago tengo que entrar de nuevo para acostarme en una camilla. No sé qué costumbre más rara tiene la gente de hablar sobre cómo ha pinchado la señorita, que si ha movido la aguja mientras la tenía dentro, que si no se ha apretado bien el brazo y le “ha salido un chorro de sangre” (literalmente), etc.
   Bueno, ahora estoy más tranquilo. Eso de ponerme a escribir en cuanto salgo de allí hace que mi corazón se calme. Eso sí, no voy a repasar el escrito (ya sabéis, acentos, ortografía, etc) porque si lo hago, otra vez estaré en el suelo.

Mi motor

   Aceleré tanto el motor que éste, harto de mis excesos, se detuvo.

   Con lo fácil que habría sido tratarlo bien...

jueves, 13 de febrero de 2014

Ella

   La veía por la calle, andando entre el gentío, y no podía reprimir un escalofrío.
   Se escondía, intentando que ella no pudiera encontrarlo, pero sabía que iba a ser cuestión de tiempo.
   Llegó el día y se la encontró cara a cara y no pudo evadir su mirada. Sabía perfectamente lo que ella le iba a decir. Se puso a llorar como un niño, pero no sirvió de nada. Era su hora y tenía que marcharse con ella.
   Lo encontraron una mañana fría de Febrero bajo unas mantas mugrientas, en el vestíbulo del Metro.
   Había muerto de frío y en su cara se podían apreciar dos hilos plateados que brotaban de sus párpados ahora cerrados.


martes, 11 de febrero de 2014

Peluche


   No se podía creer que su juguete preferido, su conejito, al que ella llamaba Peluche, fuera el objeto de deleite culinario de toda su familia.

domingo, 9 de febrero de 2014

Malabarista

Su cuerpo se tensaba sabiendo que ahí abajo no había red que lo pudiera salvar de una caída.

Maldito el día que apostó su vida.

sábado, 8 de febrero de 2014

Peter Pan

   Mi niña llora. Pero no como a veces hacen los niños, por rabietas o por dolor. Llora porque está triste. Lágrimas brotan de esos ojos tan hermosos como inmensos.
   No quiere ser mayor. Con solo cinco añitos ya piensa en su futuro y ha decidido no ser mayor porque “los mayores se mueren”.
   Quiere jugar y nos pregunta si de mayor podrá hacer lo mismo, tener sus juguetes y dormir con sus peluches. Le decimos que sí, pero ella lo cuestiona porque no ha visto nunca a un “mayor” jugar. Cree que al crecer se olvida la ilusión por jugar y ella no la quiere perder.
   No hay consuelo para esa pena. Muchas veces se le olvida, pero de pronto la oyes parar en sus juegos y llorar, con una congoja que nos encoge el corazón.
   Un día, mientras la baño, me dice sonriente que ya no está triste porque “hay unos señores que están investigando la forma de no morirse” y que así ella será una “viejecita chocha” con “tropecientos años”.
   Es una niña feliz, solo que a veces tiene miedo. Me siento impotente por no saber sacar esa pena que a veces atormenta a su corazón.
   A veces creo que tiene más años que los que realidad enseña. Un pequeño cuerpecito albergando un alma adulta. Con solo mirarme me enseña cosas, sensaciones antes no experimentadas.



   Dedicado a todos los Peter Pan y, sobre todo, a Raquel, que espero algún día lea esto y pueda reírse de esos miedos. Te quiero

viernes, 7 de febrero de 2014

Sin retorno

Hombres que cruzan alambradas
dejando atrás sus almas y
arriesgando sus cuerpos, ya
quebrantados de tanto sufrimiento.

Buscando lejos de sus casas
lo que no encontraron con sus rezos.

Hombres incomprendidos por
esta sociedad egoísta que no
entiende que lo que solo buscan
es una oportunidad que ella tuvo
y ellos no pudieron.

miércoles, 5 de febrero de 2014

Para siempre

    Todos los días me traía un ramo de flores. Todos los días , cuando llegaba, me decía que me había echado de menos y me contaba lo que había hecho a lo largo del día.
    Pero un día dejó de hacerlo. Ya no me echa de menos, ni me cuenta sus cosas.

   Ahora está conmigo, para toda la eternidad, siempre juntos.

lunes, 3 de febrero de 2014

Nieve

Nevaba y se acordó de cuando era niña y deseaba jugar con la nieve, sentirla en sus manos.

Ahora la nieve caía sobre el cartón donde se guarecía y calaba su enjuto cuerpo, y lo único que deseaba era soñar con esos tiempos felices, tan lejanos. 

sábado, 1 de febrero de 2014

Nacimiento


   La miró con la dulzura y respeto que se tiene a una alma nueva. La miró con el amor que se tiene a un hijo. Y la dejó ir, ansiosa de conocimiento.

jueves, 30 de enero de 2014

El perdón

  No sabía ser feliz. Si estaba plácidamente haciendo algo siempre se torturaba con algún pensamiento que le sosegara el alma. Es como si se castigara continuamente por algo que ni ella sabía qué era. Incluso hizo la visita a varios psicólogos para que pudieran remediar ese mal, pero no obtuvo resultado alguno.

   Un día encontró el remedio. Acabaría con esa tortura en un abrir y cerrar de venas y mientras lo hacía se vio a ella, con otra cara, otro cuerpo, haciendo lo mismo. En ese mismo instante se dio cuenta de lo que le torturaba: el no haberse perdonado. Tenía una oportunidad para hacerlo, pero era demasiado tarde. Sabía que tendría que recordar en su nueva vida todo lo que le había sucedido en ésta para no acabar igual y seguir con su tortura particular.

Un nuevo día

Despertó y cogió su mano, antaño joven.

Miró su arrugada cara, sus ojos apagados, pero con el mismo guiño de complicidad.

Un nuevo día , el mismo amor.

lunes, 27 de enero de 2014

Desidia

    Dicen que todos tenemos una alma gemela, alguien con la que no hace falta hablar para que con una sola mirada te entienda. Yo la encontré hace tiempo y, por mi desidia, creo que la estoy perdiendo.

   Lucharé por no perder esa parte de mí que me hace cometer locuras de vez en cuando, que apacigua mis miedos, que me hace sentir yo más que yo mismo. Lucharé por no perder mi conexión con la felicidad.

domingo, 26 de enero de 2014

Quiero

Quiero creer en los Reyes Magos, en el Ratoncito Pérez, que las hadas y los gnomos existen.
Decir lo que siento sin que nadie se sienta ofendido y llorar cuando me apetezca.
Quiero creer que cuando me muera me iré al cielo.
Quiero ser feliz.
Quiero ser niño.

sábado, 25 de enero de 2014

Solo yo

   No entendemos el dolor del prójimo hasta que no lo experimentamos nosotros mismos y aún así nuestro dolor “será más grande que el suyo”. Así es nuestro egoísmo.

     Este mundo esta lleno de millones de egoístas que nunca harán nada por nadie porque no lo consideran necesario.

viernes, 24 de enero de 2014

Nein

     30-4-1945: no todos los días se puede decir que he sido el mayor asesino de la historia y eso que no fui el autor material , pero sí el intelectual. Soy un cobarde y la única muerte que voy a llevar a cabo de forma física va a ser la mía.

   Espero que la historia no se porte mal conmigo.

lunes, 20 de enero de 2014

Irracional

   Tenía miedo porque sabía que iba a morir y lo sabía porque jamás ninguno de sus compañeros había salido de allí con vida. No escucharon ni sus súplicas ni sus lamentos. No servía de nada.
   No entendía cómo unos seres, que se suponían eran “racionales”, se enfervorecían ante tamaña violencia y derrame de sangre.
   Estaba dispuesto a defenderse y a matar a su asesino, si eso era posible.
    Se abren las puertas y empieza el suplicio para él y la diversión para otros. Empieza “la fiesta nacional”.


Monotonía


Todos los días hacía lo mismo. Con una sola diferencia: la víctima era distinta.

Vacuna

Me asusta el no sentir nada ante tanta barbarie. Los telediarios, al igual que una simple vacuna, me están inmunizando. Y me preocupa.

domingo, 19 de enero de 2014

Ley de vida

       La dejó marcharse, pero no sin antes decirle que se arrepentiría eternamente de su decisión.
       Nadie la amaría más que ella, pero también entendía que era ley de vida. Su hija ya tenía los cincuenta años y era hora de independizarse.

     ¿Sabría valerse por sí misma? La pregunta valía para las dos, tanto para la madre como para la hija.

sábado, 18 de enero de 2014

Amor

No sabe cómo pasó, pero un día despertó y se dio cuenta de que ya no la quería y lloró sin consuelo.Se negó a tener ese sentimiento porque sabía que era la mujer de su vida y que quería estar con ella hasta el fin de sus días.

Nunca le dijo lo que sentía porque estaba dispuesto a luchar para que el amor volviera a su corazón.

sábado, 4 de enero de 2014

Mi peor enemigo


Pum, pum, pum. Mi corazón se acelera de una forma vertiginosa y no sé cómo controlarlo.
Me aferro a ideas y pensamientos agradables para que se apacigüe mi ansiedad, pero hoy no funciona.
Empiezo a marearme porque me cuesta respirar. Abro las ventanas de par en par para que el aire frío entre en mis pulmones.
¡Basta ya! ¿Pero qué me estoy haciendo? ¿No me doy cuenta que cuanto más me resista peor será? Ya no puedo ni sostenerme en pie.
Y encuentro la solución en un consejo que un día me dieron y que hoy sigo sin darme cuenta: no pienso en nada, dejo la mente en blanco, dejo las ideas escapar. Y ello conlleva su resultado, mi corazón se relaja.
A veces el peor enemigo es uno mismo. No es fácil seguir el consejo que me dieron, pero poco a poco voy aprendiendo. A esa persona le estaré eternamente agradecido.